La verdad es que nunca me lo había planteado. La carrera de Periodismo te prepara para un mundo que, en parte, ya no existe. Sin embargo, al cabo de un tiempo te das cuenta de que existen muchas más posibilidades de trabajo de las que te habían contado. En este sentido, ser redactor web y ser tu propio jefe tiene muchas ventajas. Supone un cambio de mentalidad muy radical, pero que puede dar muy buenos frutos si te lo sabes montar.
En gran parte me ayudó el hecho de comprobar que otros periodistas se estaban dedicando a esta profesión y les iba bien. Especialmente doy gracias a este blog y a ti, Roger, por tus sabios consejos. Ésta ha sido una de mis bitácoras de referencia para poder iniciar mi camino como freelance.
Al principio entré en el mundo de la redacción por falta de salidas laborales, pero al cabo de un tiempo me di cuenta de que este trabajo me permitía hacer algo que siempre había querido y que no todos los periodistas ni escritores pueden hacer: vivir de la escritura. Dentro de los sacrificios que implica ser autónomo, me siento feliz con mi trabajo.
Creo que hay un periodismo viejo que no acaba de morir e insiste en los topicazos de siempre. Pero eso ya no funciona. Al mismo tiempo, está surgiendo un periodismo joven, nativo, moderno y enfocado en el lector, que entiende el lenguaje de Internet, cuenta historias u organiza la complejidad de los datos de la red y aporta valor al usuario.
Hablo de nuevos medios como Jot Down, Yorokobu, eldiario.es o elespañol.com, pero también de los bloggers independientes que logran aportar su granito de arena al periodismo desde sus bitácoras. Aún queda mucho por hacer y es apasionante lo que se está haciendo.
Sí y no. Me gustó la carrera porque me dio la oportunidad de aprender a hacer cosas que me supusieron un desafío como salir a la calle a buscar historias y escribir reportajes. También creo que la etapa universitaria, si sabes aprovecharla, te aporta unos conocimientos amplios que te sirven para cualquiera que vaya a ser tu profesión, independientemente de que la carrera de Periodismo tenga mucho que mejorar para adaptarse al mercado. Hay cosas, sin embargo, que no se aprenden en Periodismo y sólo las conoces cuando te enfrentas con la cruda realidad. Aprender a vender tu trabajo, por ejemplo.
¿Y te han servido los contactos y la experiencia de trabajar para otros?
Para empezar como redactor freelance, lo que más me ayudó fue leer muchos blogs. Es una profesión algo desconocida y muchos periodistas que trabajan en los medios no saben aún muy bien de qué va esto. Internet nos permite encontrar contactos de manera muy rápida. Con todo, la experiencia vital que sacas de estar al lado de otros profesionales, incluso de los errores que he cometido, me ha sido imprescindible para crecer como persona y como redactor.
También impartes clases sobre “Emprendimiento en periodismo” en la universidad. ¿Planteas a tus estudiantes la posibilidad de trabajar como freelance o de crear su propio medio de comunicación? ¿Cómo lo ven?
Ese es uno de los objetivos de la asignatura. Hablamos de microperiodismo y microemprendimiento, ya que la idea es que los alumnos puedan crear blogs periodísticos, buscar formas de financiación, poner en práctica las narrativas digitales y aprender a trabajar de manera autónoma plateando un proyecto propio.
La web está realizada con WordPress y es una plantilla gratuita personalizada. Conozco HTML y CSS y un poco de PHP. Eso me ha permitido hacer algún que otro cambio, pero más allá de eso, no es gran cosa y se puede mejorar mucho.
Hoy día se puede hacer una web medianamente decente por tu cuenta sin contratar a un diseñador (comprando una plantilla u optimizando una gratuita), lo que no quiere decir que si contratas a uno puedas tener una web aún mejor y también ahorrar mucho tiempo.
De vez en cuando, si le puedo dedicar tiempo, trato de tocar temas que a veces pueden suscitar preguntas en mis clientes o pienso que me pueden traer tráfico cualificado a la web. Lo cierto es que no tantos redactores tienen página web y eso permite que, a pesar de que el blog tenga pocos contenidos, quien de verdad está interesado acaba llegando a la página por Google y me acaba pidiendo presupuesto.
Creo que son dos temas que ahora mismo tienen mucha demanda, principalmente porque están surgiendo muchas empresas al abrigo de las nuevas tecnologías. También hay muchas agencias de marketing compitiendo por captar clientes, así como un gran número de empresarios que quiere aprender más sobre cómo vender por Internet. Con todo, he escrito y escribo de varios temas y me gusta abordar varias temáticas para seguir aprendiendo.
Actualmente la principal forma de captación de clientes es a través de contactos con clientes con los que ya trabajo. Diría que casi el 70-80% y el resto me llega a través de la web o de acciones de e-mail marketing, que hago en momentos muy específicos.
Me ayudan a mantenerme informado de las publicaciones en los blogs que más me interesan. También contribuyen a dar difusión a mi trabajo y a mantenerme en contacto con colegas del sector.
Principalmente trabajo para agencias, empresas de servicios y tiendas online. Para particulares, en muy pocos casos. Me gusta cuando los clientes cuentan también con otros profesionales de marketing online, por lo que mi labor como redactor no es una tarea aislada, sino que se complementa con la ayuda de otros profesionales. En el caso de las agencias cuento con esto, pero siempre es estimulante ver que cada vez más las pymes manejan estos temas con un enfoque integral.
El primero es que muchos no valoran su trabajo y tiran los precios, lo que acaba generando desconfianza en el lado de la demanda cuando trabajan con redactores poco profesionales. El segundo es la falta de profesionalización: escribir no debería ser sólo una afición ni hacerse gratis o en negro, sino un trabajo cualificado que requiera conocimientos de SEO, marketing, etc. Y en tercer lugar, en nuestro país el Estado no pone las cosas muy fáciles al autónomo en general.
Hasta ahora no me ha pasado nunca. Si un cliente tarda más de 30 días en pagarme, no acepto nuevos encargos de él y le aviso periódicamente de que debe realizar el ingreso hasta que lo hace. Tampoco acepto artículos de prueba gratuitos. Sí he sufrido retrasos, pero todos mis clientes me han pagado. Generalmente, cuando trabajas con empresas serias y fiables, que ya cuentan con una trayectoria y tienen buenas referencias, actúan de forma honesta contigo.
Creo que es de gran utilidad el newsletter de Eva San Agustín para todos los que quieran aprender más sobre marketing de contenidos, así como este blog. Sobre negocios en Internet, marketing, SEO y marca personal leo a menudo: Lifestyle al cuadrado, Marketing de Guerrilla, Vivir de la red y el blog de Andrés Pérez Ortega.
Lo bonito de ser autónomo es que te das cuenta de que no tienes por qué seguir haciendo siempre lo mismo. La sociedad nos ha metido en la cabeza que la seguridad laboral es más importante que la libertad de emprender nuevos proyectos. En mi opinión, hay que mantener un equilibrio.
Debemos evolucionar constantemente porque el mercado está en constante movimiento. Me gustaría crear nuevos negocios relacionados con la comunicación y el periodismo online, seguir aprendiendo, invertir en nuevas ideas y seguir enseñando lo que he aprendido.
¿Qué te ha parecido esta entrevista? ¿Estás de acuerdo o en desacuerdo con lo que nos cuenta Samuel Juliá? ¡Da tu opinión!
Soy periodista, redactor freelance y bloguero desde 2006. Escribo para otros porque quiero comprar tiempo para escribir para mí. Además, enseño a otros freelance cómo ganar dinero trabajando por su cuenta en RedactorFreelance.com y mediante mi ebook «Guía del Redactor Freelance». ¡Si quieres hablar, contacta!
Eugenia Rodríguez
24 noviembre 2015 at 09:08Hola, Roger:
Simplemente me ha encantado la entrevista, yo también soy periodista y también me he reinventado profesionalmente por motivos diversos. Hace un mes lancé mi página y ya estoy trabajando para mi primera cliente. Me ha sido muy útil y motivadora la aportación de Samuel. Muchas gracias a los dos.
Jesus Dugarte
24 noviembre 2015 at 17:04Me ha gustado mucho la entrevista, además actualmente me encuentro en la busqueda de ofertas en redacción de contenido y me ha sido de mucha utilidad todas las rferencias que se citan a lo largo de la nota.
matblogger
24 noviembre 2015 at 22:21Creo que todo muy bien en lo que se refiere a esta entrevista y en total acuerdo con lo planteado.Lo ideal sería que al menos se brindara mayor luz que se tradujera en oportunidades reales para quienes consideramos hacemos bien el trabajo de escribir,y por tanto,pudieramos desempeñarnos con solvencia en esta labor.Claro está, que se reconozcan los méritos a quienes con propiedad podemos hacer de la palabra una realidad material tangible.
San Valentín
11 diciembre 2018 at 08:52La entrevista me ha gustado mucho. Voy a echar un vistazo ahora mismo a las páginas que se citan en el artículo. ¡Una gran aportación!
Redactor Freelance
11 diciembre 2018 at 11:04Totalmente de acuerdo, es un placer que Samuel nos comparta su sabiduría y visión del negocio. ¡Gracias!
Diamantes
5 enero 2019 at 20:25Sin duda una gran aportación, un tema muy interesante. Es curioso, yo también estudie periodismo y al final he terminado trabajando en otro sector… me resulta interesante pensar en ello, y es que cuando miro a mi alrededor existen muchos periodistas que hemos acabado como freelance… ¿que le pasa al periodismo en este país?
Redactor Freelance
7 enero 2019 at 09:02Pues seguramente lo que ocurre es que las condiciones de trabajo que ofrecen las empresas periodísticas no son rentables ni atractivas para los nuevos profesionales que siguen saliendo en grandes cantidades de las facultades de periodismo. Esto provoca que, pese haber estudiado periodismo, sea realmente difícil ganarse la vida con esta profesión.
De modo que muchas personas acabamos buscando alternativas laborales en el mundo de los contenidos. Afortunadamente, en mi opinión los conocimientos que adquieres al estudiar periodismo son muy útiles para poder desarrollar otros tipos de oficios en este ámbito, como por ejemplo la redacción freelance. ¡Saludos!